sábado, 23 de enero de 2016

¡Un sábado libre!


Estoy como que no me lo creo aún, y mirad que ya casi estamos a domingo, y que este sábado se me ha pasado volando, pero en serio, estoy que no me lo creo...¡UN SÁBADO LIBRE! 

No os podéis imaginar lo que significa no trabajar un sábado para todas aquellas personas que curramos en el comercio: el sábado, el día más cansado de toda la semana, y no solo porque ya llevas toda la semana hasta los cojones de pasar productos y de aguantar a clientes pesados, sino porque el sábado es cuando más gente acude a comprar; es lógico, mucha gente no trabaja y es el momento que tienen para hacerla, si vale, lo comprendo, pero, ¿por qué tienen que estar hasta el ultimo momento dando vueltas con el carrito por todos los pasillos? ¿No tengo yo derecho de irme a mi casa y tumbarme en el sillón a tocarme la barriga? (Esta es otra historia, no nos perdamos, pero es que cuando empiezo a hablar de estos impresentables de última hora me enciendo...). Pero vamos a lo que vamos: ¡bendito sábado libre!


Y aún así no os creáis, que durante todo el día de ayer, cliente si, cliente también te preguntaban eso de: '¿mañana se abre?', y tu, disimulando esa sonrisa que quiere escaparse de tu boca, e intentando no gritarlo lo más alto posible, contestar con toda tu educación: 'no señor/a, mañana cerramos'. Muchos de ellos decían, todo concienciados con la causa, y apiadándose de los pobres trabajadores: 'menos mal, ya esta bien que os cierren y os dejen descansar un día', y tu, afirmando con la cabeza con solemnidad y con cara de 'llevo muchos días sin librar, necesito descansar'. Pero no todos son así, claro, y es que algunos ponen esta cara cuando les contesta que si, efectivamente se cierra, y si, por supuesto, es sábado:


Y la típica respuesta a tu respuesta es '¿y por qué?'. Y tu, ahora si con la mayor educación de la que haces gala, y esta vez con una sonrisa de oreja a oreja, les contestas: 'pues porque es fiesta, señora/caballero'. Y ellos, encima, se van refunfuñando y cagándose en todo.

Vamos a ver, alma de cántaro, que yo se que es sábado y que tu quieres hacer tu maldita compra, pero en serio, ¿no tienes comida suficiente en tu nevera para sobrevivir un solo día más? ¿No puedes coger el viernes por la tarde, venirte a comprar y así ya lo dejas hecho? Pues se ve que no, se ve que eso de dar por saco a los trabajadores es algo que necesitan hacer cada semana, porque encima los que te contestan mal son aquellos que van de exigentes por la vida. ¡Váyase usted a la mierda oiga! Que lo mismo que usted tiene familia y le gusta pasar los fines de semana con ellos, yo también la tengo, y amigos, que cada vez que nos volvemos a ver hemos envejecido un tanto, ¡ya está bien!

Una vez pasas el 'mal trago' de lidiar con estos clientes, y de irte a tu casa la mar de contenta (vamos, que parece que te vas hasta de mini vacaciones y todo), llega el momento de decir: ¿que hago este sábado libre que tengo? Pues me cojo el coche, a unos amigos, y nos vamos de compras, porque si, porque ese día no vamos a ganar un duro, pero nos vamos a gastar lo que hemos ganado en la semana, que nos lo merecemos. Y luego, lo que resta del día, a descansar, que el lunes llega pronto, y es que el domingo no va a dejar de ser domingo, por mucho que queramos.

¡VIVAN LOS SÁBADOS LIBRES!

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